Explorar Río de Janeiro en auto te permite descubrir algunos de sus lugares más emblemáticos a tu propio ritmo, disfrutando de paisajes impresionantes y evitando las multitudes. Un recorrido por esta vibrante ciudad y sus alrededores te va a llevar a los lugares más destacados que son aún más accesibles con un auto.
Comenzá tu aventura en el Cristo Redentor y el Corcovado, desde donde vas a tener las mejores vistas panorámicas de la ciudad. Conducir por la tranquila y verde ruta hasta la cima seguramente se convierta en una experiencia más relajada. Desde ahí, podés descender hacia la Lagoa Rodrigo de Freitas, donde un paseo en auto alrededor de su orilla ofrece vistas espectaculares del lago y las montañas circundantes.
No te pierdas las hermosas playas de Barra da Tijuca, un poco más alejadas de las concurridas Copacabana e Ipanema, pero fácilmente accesibles en auto. Con más de 18 kilómetros de arena dorada, es un lugar perfecto para disfrutar de un día de playa. Más al oeste, Recreio dos Bandeirantes es otro paraíso costero, conocido por su ambiente relajado y sus excelentes puntos para surfear.
Si buscas aventura y naturaleza, tenés que visitar el Parque Nacional de Tijuca, un enorme espacio verde lleno de rutas de senderismo, cascadas y vistas espectaculares. Manejar hasta los diferentes accesos del parque te ahorra tiempo y te permite explorar lugares como la Pedra Bonita, donde los más valientes pueden volar en ala delta.
Un viaje en auto también te lleva a la histórica y encantadora ciudad de Petrópolis, a solo 68 km de Río. Conocida como la "Ciudad Imperial", Petrópolis es famosa por su arquitectura colonial, el Palacio Imperial y sus calles llenas de historia, ideales para recorrer en una escapada de un día desde la ciudad.
Además, si lo tuyo es explorar lo menos turístico, el Mirante Dona Marta es un punto de vista menos concurrido que ofrece una vista impresionante del Cristo Redentor, la Bahía de Guanabara y el Pan de Azúcar, ideal para llegar en auto y evitar las aglomeraciones.
Y lo mejor de todo, podés empezar tu recorrido alquilando un auto en el aeropuerto de Río de Janeiro, con la comodidad de retirarlo directamente al aterrizar. Esto te brinda flexibilidad desde el primer momento para moverte libremente por la ciudad y descubrir todo lo que Río tiene para ofrecer. ¡Explorar Río en auto es sin duda la mejor manera de vivir su magia!